ISSN-e: 2007-7335
En tiempos electorales, los investigadores de la educación tendemos a incrementar nuestras reflexiones sobre lo que funciona mal del sistema educativo, lo que quisiéramos que el nuevo gobierno modificara y también lo que desearíamos conservar. Interrogamos a los candidatos presidenciales, exigimos que presenten su programa para la educación y la investigación científica, y organizamos foros de discusión, con miras a orientar las próximas reformas. ¿Tiene algo qué decir la historia de la educación ante este panorama? La mirada histórica obliga, necesariamente, a hacer una pausa para la reflexión. Esa mirada indica que, si bien las reformas tienen un gran impacto, los cambios en el terreno educativo poseen su dinámica y tiempos propios, que no necesariamente coinciden con los de la política.